- las piezas deben dejarse secar inmediatamente después del lavado, en lugar bien ventilado, evitando así manchas de humedad.
- Se debe alisar las piezas suavizando las pliegas y formando las copas antes del secado y colgar, por forma a que no se arrugue o pliegue las piezas.
- Es de evitar la exposición directa a la luz solar, qué puede descolorar las piezas.
- Además, no es aconsejable secar en la máquina secadora, ya que las altas temperaturas pueden deformar y dañar la pieza.